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Rosales, Yris yrisleo@gmail.com
Tenías, Martín mtenias64@gmail.com
En cualquier ámbito personal o social, se requiere de alguien que lleve al grupo, equipo u organización hacia la productividad y el éxito: un líder. Pero, ¿Qué es líder? Es esa persona con capacidades y cualidades para conducir a otros, en un proceso, que permitirá alcanzar un objetivo, meta o propósito específico. El norte de su acción está dirigido al logro de principios compartidos de modo voluntario; es decir, movilizar a los otros en una dirección común.
La persona para ser líder debe ser y mostrarse fiel,
perseverante, carismático, convincente, comprometido, ya que actuar como tal es
un arte. Para ejercerlo no se necesita imponer su figura o pensamiento, oprimir
la libertad, impedir la crítica ni ser coercitivo; sino alcanzar un nivel alto
de empatía e identificación con el colectivo. De allí que un apoyo innegable del
líder sea la práctica de una ideología alrededor de la cual se construya un
ideario colectivo, la búsqueda del consenso a partir del saber escuchar y el
respeto a los principios de igualdad y participación gregaria como el ejercicio
de autoridad absolutamente alejada del autoritarismo.
De acuerdo con Horn y Marfan (2010), el líder tendría
“la capacidad de plantear principios de modo que sean tomados por otros como
objetivos propios, creándose así un sentido compartido que moviliza a la
organización en pro de estos principios comunes.” (p. 83). Siempre es necesario
un líder, es la única base sobre la cual es posible movilizar a la masa para alcanzar
un objetivo, meta o propósito, de importancia decisiva para ella y motor de su actuación.
En el marco de la individualidad, el líder tiene su
fundamento principal en la capacidad de poder liderarse a sí mismo, para de
acuerdo con Cantú y Cuervo (2010), decidir en pro del bienestar personal y del
entorno; eso sí, antes de pensar en liderar a alguien más, ya que deben dar
muestras de poder liderarse a sí mismo. Por eso, Madero (s/f), expresa “el
líder además de parecerlo, debe serlo”.
Lo anteriormente dicho determina la Importancia del
liderazgo individual para el incentivo de la pertinencia y pertenencia en la
resolución de los problemas institucionales u organizacionales. Ha de ser un crítico
metódico y constructivo, tomar decisiones participativas y consensuadas, no
porque los resultados logrados sean los mejores (posición asumida por un
dirigente), sino por ser lo moralmente justo y legitimador de su autoridad y poder
como líder.
El líder sabe diferenciar entre el ejercicio de la
autoridad, del poder y el liderazgo. ¿Cómo explicar esto? Por ejemplo, en la
película El Gladiador, el personaje del general Máximo sirve de referencia para
distinguir estos términos, pues pueden confundirse o complementarse entre sí,
siempre y cuando se delimiten desde la naturaleza de cada uno. El Gladiador será
autoridad, poder y líder según el punto de comparación, bien se compare con el
César o con el Príncipe.
El Gladiador reúne las características de líder
personal porque era fiel a sus principios como ciudadano romano: luchar hasta
el final por la República y el triunfo de Roma. A pesar de sus deseos de volver
a su hogar, se somete a la voluntad del Emperador. Es perseverante en su
objetivo, se mantiene en la lucha aunque pierde su arma y cabalgadura. Su
carisma se evidencia en el reconocimiento que a través de aplausos y vítores le
brinda el ejército al culminar la batalla. Convincente, cuando se dirige a los
soldados para motivarlos a luchar y ganar por la gloria de Roma; comprometido,
al compartir en igualdad de condiciones las vicisitudes de la batalla con sus
guerreros, sin distinción jerárquica. No necesitó imponer su figura o
pensamiento, vejar, restringir la libertad, la crítica ni ser coercitivo; sino alcanzar
un nivel alto de empatía e identificación con el colectivo.
De acuerdo con Madero (s/f), el Emperador más que
líder representa la figura del dirigente, pues ostenta un ejercicio del poder fundado
en una autoridad estatutaria, institucional y jerárquica, contrario a Máximo
cuya autoridad surge del prestigio y la legitimidad ganada ante sus
compañeros por su calidad y competencia.
Como
conclusión, estableciendo analogía entre jefe y autoridad, para reconocer un líder, referimos el
pensamiento del conferencista mexicano, administrador de empresas y formador de
líderes Miguel Ángel Cornejo: “El jefe maneja a la gente; el líder la prepara.
El jefe masifica a las personas, las convierte en número y en fichas,
deshumaniza súbdito por súbdito hasta quedarse con un rebaño sin rostro ni
iniciativa. El líder conoce a cada uno de sus colaboradores, los trata como
personas, no los usa como cosas.”
Referencias
Cantú, R. y Cuervo, H. (2010) Liderazgo
individual. Extraído desde: http://www.ricardodcantu.com/index.php/empresa/35-empresarios/127-
liderazgo Consulta: 12-03-2012.
Franzoni, D.,
Wick, D., Lusting, B. (Productor) y
Scott, R. (Director), (2000). El Gladiador. [Cinta cinematográfica]. EE. UU. Universal Pictures.
Horn, A.,
Marfan, J. (2010). Relación entre liderazgo educativo y desempeño escolar:
Revisión de la investigación en chile. Psicoperspectivas, 9 (2), 82-104.
Extraído desde: http://www.psicoperspectivas.cl. Consulta:
12-03-2012.
Madero, B. (2011).
Diferencia y similitudes entre liderazgo, poder y autoridad. (Adaptado a
Venezuela). Ensayo. Extraído desde: http://desarrollogerencialyliderazgouft.blogspot.com/2011/11/diferencia-y-similitudes-entre.html.
Consulta: 12-03-2012.
Miguel
Ángel Cornejo. Extraído desde: http://www.frasesypensamientos.com.ar/frases-de-jefe.html
Consulta:
12-03-2012.
Dicen que para ser líder no se debe ser autoritario, pero algunos lideres poseen como parte de su personalidad ese autoritarismo por ejemplo Chavez, sin duda es un líder, pero en su fondo es autoritario, el mismo Hitler lo era.
ResponderEliminarAquí se dicen las siguientes frases pero esto es realmente todo lo que hace nuestro presidente el lider de la revolución. Chavez impone su pensamiento, oprime la libertad, no permite criticas, es coercitivo. y sobre todo es autoritario. y se mantiene en el poder.
Para ejercerlo no se necesita imponer su figura o pensamiento, oprimir la libertad, impedir la crítica ni ser coercitivo....De allí que un apoyo innegable del líder sea la práctica de una ideología alrededor de la cual se construya un ideario colectivo, la búsqueda del consenso a partir del saber escuchar y el respeto a los principios de igualdad y participación gregaria como el ejercicio de autoridad absolutamente alejada del autoritarismo.